Distribución de dividendos en España: requisitos legales y tipos principales

La distribución de dividendos constituye una práctica fundamental para las empresas y sus socios, ya que implica el reparto de los beneficios obtenidos por la compañía. En lugar de acumularse como reservas voluntarias dentro de la empresa, los beneficios se reparten entre los titulares del capital social.

Este proceso requiere un análisis exhaustivo, dado que el tipo de reparto de dividendo puede afectar significativamente a las estrategias financieras, la fiscalidad, y el cumplimiento normativo en las jurisdicciones donde socios y empresas operan.
En este artículo, exploramos los principales tipos de distribución de dividendos y los requisitos clave para garantizar un reparto eficiente, ajustado a la normativa vigente y en línea con los objetivos estratégicos de la empresa.

Tipos de distribución de dividendos

Las empresas pueden distribuir dividendos mediante distintas modalidades, según sus necesidades y circunstancias. Los principales tipos de reparto son:

  • Distribución de dividendos con cargo al resultado positivo del ejercicio: Se realiza de forma periódica y proviene de los beneficios generados por la empresa durante un periodo concreto, generalmente un ejercicio anual.
  • Distribución de dividendos con cargo a reservas voluntarias: Este tipo de reparto, de carácter extraordinario, suele realizarse por motivos ajenos a la actividad ordinaria de la empresa, como la venta de activos relevantes (inmuebles o participaciones de una parte de la compañía).
  • Distribución de dividendos a cuenta: En esta modalidad, la empresa distribuye anticipadamente una parte del beneficio antes del cierre del ejercicio financiero en curso. Se deben cumplir dos condiciones clave:
    • Liquidez suficiente: La empresa debe disponer de fondos líquidos para la distribución
    • Limitación cuantitativa: La cantidad a distribuir no puede exceder los resultados obtenidos desde el cierre del último ejercicio, deducidas las pérdidas de ejercicios anteriores, las reservas legales (que deben cubrir al menos el 20% del capital social) y la estimación del impuesto a pagar sobre dichos resultados.

Requisitos y forma de ejecución de la distribución de dividendos

La distribución de dividendos en España está sujeta al cumplimiento de los siguientes requisitos:

  • Mantenimiento del patrimonio neto: Conforme al artículo 273 de la Ley de Sociedades de Capital, solo se podrán repartir dividendos si el valor del patrimonio neto de la empresa no resulta, tras la distribución, inferior al capital social.
  • Reserva legal: De acuerdo con el artículo 274 de la Ley de Sociedades de Capital, se debe destinar un porcentaje de los beneficios de la sociedad a la Reserva legal, hasta que ésta alcance el 20% del capital social.
  • Aprobación por la Junta General: El reparto de dividendos debe ser aprobado por la Junta General de socios.
  • Informe de liquidez para los dividendos a cuenta: En caso de tratarse de un reparto de dividendos a cuenta, el administrador debe redactar un informe que acredite la existencia de liquidez suficiente para la distribución.
  • Cumplimiento fiscal y contable: Es imprescindible cumplir con la normativa fiscal y contable aplicables. En el ámbito internacional, muchas empresas recurren a tratados fiscales bilaterales para evitar la doble imposición y optimizar la fiscalidad del reparto.

Conclusión

La distribución de dividendos es una herramienta estratégica que refuerza la relación entre una empresa y sus socios. Sin embargo, su correcta ejecución requiere un análisis riguroso, especialmente en empresas internacionales, donde la normativa fiscal y financiera es más compleja. Contar con asesoramiento legal y fiscal especializado es esencial para garantizar una distribución de dividendos efectiva y conforme a la normativa local e internacional.

Si desea información adicional sobre la distribución de dividendos en España,

Este artículo no constituye asesoramiento jurídico

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